Queridos amigos,
Estos recuerdos no son nazarenos. Disculpame Titino, pero tenia ganas de escribir esto.
Son de la comunidad de Montevideo, donde fui postulante de la congregación en el año 95.
Fue el año mas dificil porque fue cuando entendi que la vocacion religiosa no era para lo que estaba llamado.
Sin embargo fue el año más hermoso en la búsqueda de la voluntad de Dios.
Era una hermosa comunidad. Madura, con mucha caridad entre sus miembros.
Ojalá este modelo de comunidad se replicara en todas las casas de la Obra.
Les adjunto una foto, de la última cena antes de venirme a Bs As, 30 de noviembre de 1995. Y menciono a sus miembros de izquierda a derecha.
Padre Miguel Tofful, hoy superior general de la Obra. Siempre admiré su fuerza y su oración. No sé como hacía para estar todo el tiempo acompañando a los chicos del hogar, trabajar en el campo y a la vez sacar las mejores notas en la facultad. Ya pintaba pa bueno el pollo.
Padre José Antonio Silva. El gordo, con respeto lo digo, era la inocencia en persona, y me moría de risa con él. De vez en cuando mateabamos en su cuarto. Le costaba estudiar, pero le ponía ganas. En un momento pensé que se nos iba para Dalmanutá, una congregacion nacida en Uruguay de la mano del padre Popelka, otrora jugador de Nacional de Montevideo. Un cura que fue jugador de futbol, que tal?
Hno Gianfranco Mori, siempre tan formal y tan formador, cuidando con celo lo que se llamaba el Sancta Santorum, lugar donde estaban las cosas mas ricas de la cocina. La entrada estaba vedada a muchos. Recuerdo un episodio: preparaba el desayuno para los chicos del hogar, y me ve abriendo un sachet de leche con los dientes. Me dijo con caridad que habia que hacerlo con un cuchillo. Nunca más volví a hacer eso, totalmente anti higiénico (y bueno, no lo sabía) gracias Franco. Por cierto, aprendiste a leer las lecturas sin trabarte? Va con amor y respeto eh?
Padre Juan Finozzi, querido padre Juan, superior de la casa y, en aquella época, delegado. Recuerdo algunas charlas que hemos tenido antes de mi salida. Me dijo que no movería un dedo para que me quedara y me recomendó un libro del cardenal Martini: poner orden en la propia vida. Bellísimo. Me dio una libertad increible, y se lo agradezco, porque realmente fue un padre y el mejor superior que tuve. Junto con el padreMiguel, eran los que más temprano se levantaban a rezar. No había día en que no los encontrara rezando en la capilla.
Padre Rudi, el garoto. Vivía con mucha alegría su vocación sacerdotal. Y aprendí de él que la iglesia no solo es un lugar donde se hace acción social y reparte sacramentos, que por cierto es muy bueno que lo haga. El estaba convencido de que Jesús seguía haciendo los milagros que hizo cuando estuvo en la tierra. Cuantos dolores de cabeza padre Rudi. Pero es cierto, Jesus hoy es tan real como hace dos mil años. Mi abrazo para vos.
Por ultimo estoy yo.
Quien tomó la foto fue Maximo Benitez, ex religioso, que es de Laferrere y actualmente vive en Montevideo, donde formó una linda familia. Muy inteligente el cabeza, demasiado diría... peleador con las estructuras de la iglesia, pero lo hacía desde una profunda convicción por lo social que lo llevaba a cuestionar algunos aspectos de la vida sacerdotal. Ojalá que esto no se pierda la mirada crítica y revisionista del modo de vivir de los curas. Es bueno cada tanto darle una mirada, que no?
Otro que falta es el padre Aldo Pesceta, que Dios lo tenga con El. Que cura bravo que era eh? Su ultima obra fue la iglesia Divino Espiritu Santo. Bellísima. Para mi el viejo era un capo. Cuando terminaba la misa sabia decir en la sacristia: prosit, y yo tuve que aprender a decir: tibi quoque... jajaja. Su italiano no le permitia pronunciar la letra j. Tal es así que a Borjon le decía Corque (Jorge Lazzari).
Bueno, andaba con ganas de escribir.
Disculpen. Lo de "revelar cosas" era un gancho para la lectura.
Les mando un gran abrazo!
Oscar
Era una hermosa comunidad. Madura, con mucha caridad entre sus miembros.
Ojalá este modelo de comunidad se replicara en todas las casas de la Obra.
Les adjunto una foto, de la última cena antes de venirme a Bs As, 30 de noviembre de 1995. Y menciono a sus miembros de izquierda a derecha.
Padre Miguel Tofful, hoy superior general de la Obra. Siempre admiré su fuerza y su oración. No sé como hacía para estar todo el tiempo acompañando a los chicos del hogar, trabajar en el campo y a la vez sacar las mejores notas en la facultad. Ya pintaba pa bueno el pollo.
Padre José Antonio Silva. El gordo, con respeto lo digo, era la inocencia en persona, y me moría de risa con él. De vez en cuando mateabamos en su cuarto. Le costaba estudiar, pero le ponía ganas. En un momento pensé que se nos iba para Dalmanutá, una congregacion nacida en Uruguay de la mano del padre Popelka, otrora jugador de Nacional de Montevideo. Un cura que fue jugador de futbol, que tal?
Hno Gianfranco Mori, siempre tan formal y tan formador, cuidando con celo lo que se llamaba el Sancta Santorum, lugar donde estaban las cosas mas ricas de la cocina. La entrada estaba vedada a muchos. Recuerdo un episodio: preparaba el desayuno para los chicos del hogar, y me ve abriendo un sachet de leche con los dientes. Me dijo con caridad que habia que hacerlo con un cuchillo. Nunca más volví a hacer eso, totalmente anti higiénico (y bueno, no lo sabía) gracias Franco. Por cierto, aprendiste a leer las lecturas sin trabarte? Va con amor y respeto eh?
Padre Juan Finozzi, querido padre Juan, superior de la casa y, en aquella época, delegado. Recuerdo algunas charlas que hemos tenido antes de mi salida. Me dijo que no movería un dedo para que me quedara y me recomendó un libro del cardenal Martini: poner orden en la propia vida. Bellísimo. Me dio una libertad increible, y se lo agradezco, porque realmente fue un padre y el mejor superior que tuve. Junto con el padreMiguel, eran los que más temprano se levantaban a rezar. No había día en que no los encontrara rezando en la capilla.
Padre Rudi, el garoto. Vivía con mucha alegría su vocación sacerdotal. Y aprendí de él que la iglesia no solo es un lugar donde se hace acción social y reparte sacramentos, que por cierto es muy bueno que lo haga. El estaba convencido de que Jesús seguía haciendo los milagros que hizo cuando estuvo en la tierra. Cuantos dolores de cabeza padre Rudi. Pero es cierto, Jesus hoy es tan real como hace dos mil años. Mi abrazo para vos.
Por ultimo estoy yo.
Quien tomó la foto fue Maximo Benitez, ex religioso, que es de Laferrere y actualmente vive en Montevideo, donde formó una linda familia. Muy inteligente el cabeza, demasiado diría... peleador con las estructuras de la iglesia, pero lo hacía desde una profunda convicción por lo social que lo llevaba a cuestionar algunos aspectos de la vida sacerdotal. Ojalá que esto no se pierda la mirada crítica y revisionista del modo de vivir de los curas. Es bueno cada tanto darle una mirada, que no?
Otro que falta es el padre Aldo Pesceta, que Dios lo tenga con El. Que cura bravo que era eh? Su ultima obra fue la iglesia Divino Espiritu Santo. Bellísima. Para mi el viejo era un capo. Cuando terminaba la misa sabia decir en la sacristia: prosit, y yo tuve que aprender a decir: tibi quoque... jajaja. Su italiano no le permitia pronunciar la letra j. Tal es así que a Borjon le decía Corque (Jorge Lazzari).
Bueno, andaba con ganas de escribir.
Disculpen. Lo de "revelar cosas" era un gancho para la lectura.
Les mando un gran abrazo!
Oscar